Taller de acompañamiento y trato humano al paciente en Bolivia

Durante el mes de julio estamos colaborando en la formación de educadores y sanitarios en la ciudad de El Alto, en Bolivia, en colaboración de la Escuela Javier Azagra y a petición de la Fundación Sembrando Esperanza.

Uno de los talleres que estamos impartiendo es el de "acompañamiento y trato humano al paciente", que está recibiendo el personal sanitario de diferentes centros de salud. Los centros con los que estamos trabajando tienen una identidad cristiana, por lo que entienden su trabajo desde un humanismo que va más allá de una buena atención técnica. 

Nos esforzamos por hacerles ver a médicos/as, enfermeros/as, técnicos/as de laboratorio, auxiliares, celadores/as y resto del personal que conforman los centros de salud, que el buen sanitario es el que aúna una buena formación y competencia técnica con una buena formación y competencia humana. A pesar de que estos centros son privados, nos esforzamos para que vean que el humanismo en la salud no sólo es justo y necesario sino que también es rentable económicamente, ya que una buena relación entre el paciente y el personal de la salud, influye positivamente en factores tan importantes como la adherencia al tratamiento y la mejoría terapéutica. Si somos buenos en nuestro trabajo, humanos en el trato y honestos con nuestros pacientes, éstos volverán, y lo que es mejor, nos recomendarán. 

Trabajamos temas diversos como la vocación sanitaria, la escucha activa, los índices de calidad para los pacientes, el análisis transaccional aplicado a la relación sanitario-paciente o las conductas que los pacientes esperan de sus médicos según algunas investigaciones. 

Cabe decir que los dos talleres realizados hasta ahora han sido tan bien recibidos que otros centros han demandado que vayamos a impartirlo.

Para que este taller quedara ejemplificado en aspectos prácticos, al finalizar, les proponemos a los sanitarios un decálogo del trato humano en la salud. Lo reproducimos a continuación, ya que, aunque es una pequeña muestra de las implicaciones prácticas y la importancia de la humanización de la salud, quizás pueda servir de ejemplo para personas que trabajan en la salud y que están sensibilizadas y comprometidas con  este tema.

1.QUE EL NÚMERO DE HABITACIÓN O EL DIAGNÓSTICO NUNCA SUSTITUYA AL NOMBRE DE LA PERSONA

2.QUE LAS PRISAS NO NOS LLEVEN A UN MAL DIAGNÓSTICO NI A MEDICAR INNECESARIAMENTE. ¿Y qué más?...

3.QUE NO NOS DE MIEDO TOCAR AL PACIENTE

4.QUE PACIENTE NO SEA SINÓNIMO DE PASIVO

5.QUE NO OLVIDEMOS LA HISTORIA DE VIDA

6. QUE NUESTRA NECESIDAD NO SUSTITUYA A LA NECESIDAD DEL PACIENTE

7. QUE LA INFORMACIÓN NO SÓLO LA TENGA EL MÉDICO…Y QUE EL PACIENTE TENGA LA INFORMACIÓN QUE QUIERA TENER

8. QUE LAS DECISIONES SEAN CONSENSUADAS

9. TENER EN CUENTA LAS FORTALEZAS Y RECURSOS DEL PACIENTE

10. ESTAR ATENTO A LAS NECESIDADES EMOCIONALES Y ESPIRITUALES DEL PACIENTE.